¿QUÉ EXCITA MÁS A LA MUJER?

¿QUÉ EXCITA MÁS A LA MUJER?
Por el Dr. Oscar Espino
Urólogo & Médico Sexólogo
Enero 28, 2012
Managua, NICARAGUA


SI NO LA TOCAS NO SUENA
Decía un gran amigo mío y también gran cirujano pediatra de mi país, autoproclamado señor del sexo, un frío y mortífero Juan Tenorio moderno, un enamorado Casanova y un seductor empedernido, que, “no existe mujer difícil sino mal trabajada”. Por supuesto que él se estaba refiriendo a un antiguo dicho, mucho más antiguo que él y yo juntos, pero que no por eso deja de ser objeto de meditación y reflexión, al menos desde el punto de vista del pensamiento de la sociología moderna. En la década de los sesenta, en el siglo recién pasado, era frecuente oír esa frase que se atribuía a varios autores, incluido el médico, científico, historiador, escritor y pensador español Dr. Gregorio Marañón y Posadillo, que según algunos dicen, la parafraseaba así: “No existe mujer frígida, sino varón inexperto”. Pero Julio Ramón Ribeyro Zúñiga, escritor peruano, considerado uno de los mejores cuentistas de la literatura latinoamericana, en cuya narrativa las mujeres ofrecen rasgos negativos, va más allá. En el primer capítulo de la novela Crónica de San Gabriel, el tío Felipe le dice al protagonista Lucho: "No creas en la honestidad de las mujeres. ¿Sabes que no hay mujer honrada sino mal seducida? Todas, óyelo bien, todas son en el fondo igualmente corrompidas". ¿Qué podemos decir de esto? ¿Será acaso que los hombres debemos aprendernos de memoria y ejecutar fríamente cada una de los párrafos de la obra cumbre del escritor colombiano José María Vargas Vila, Ibis, en la que dice: “Ama el placer. No ames al amor. Ama a la Mujer, diosa de carne. Amala por su carne solamente. Por el placer la mujer es una esclava. Sé su señor. Por el amor la mujer es una reina. No seas su esclavo. El hombre que ama es un conquistador vencido por su conquista. ¡Goza a la mujer! ¡No la ames nunca!
Recuerdo también que cuando estudiaba medicina en la universidad de León en mi tierra natal Nicaragua, uno de mis mejores profesores de psiquiatría, el Dr. Humberto López, nos contaba la historia de un hombre enamorado de una chica difícil de un pueblo, pero que con paciencia, cada vez que ella pasaba junto a él, le susurraba al oído: “te espero en el puente”. Y así, cada día le decía lo mismo, hasta que despertó la curiosidad de la chica que al principio no se percataba de la invitación, pero que al final, terminó yendo al puente. Ya lo decía el Dr. Santiago Ramón y Cajal, médico español, premio Nobel de Medicina en 1906 y cabeza de la llamada Generación del 80 o Generación de Sabios: “el entusiasmo y la perseverancia hacen milagros”. Pero la escritora nicaragüense, miembro de la Academia Nicaragüense de la Lengua, y quien desde 1974 ha obtenido varios reconocimientos, tanto en poesía como en narrativa, entre otros el Premio Biblioteca Breve de Seix Barral en España y el Premio Sor Inés de la Cruz 2008 en México, en su novela “El Infinito en la Palma de la Mano”, intenta con sutileza reivindicar el rol de la mujer en el papel de la existencia argumentando, en su reflexión sobre el Génesis de la Biblia, a favor de esa curiosidad particular, la curiosidad femenina, que justamente tuvo Eva ante el fruto prohibido y que según algunos críticos, finalmente debe agradecer toda la raza humana. ¿Será acaso esa curiosidad, de la que habla la escritora Belli, la que llevó al puente de la felicidad o de la infelicidad a la chica del cuento del profesor de siquiatría? ¿Deberá el hombre diseñar una estrategia de hacerse objeto-de-interés curioso para que una mujer caiga vencida en sus brazos, utilizando la expresión del olvidado escritor colombiano Vargas Vila?El Kama Sutra, la más sutil y conocida guía del amor sensual, es un antiguo texto sánscrito compuesto en el siglo IV por el sabio hindú Vatsyayana. Se trata de una colección de aforismos, explicaciones e imágenes que permiten su fácil memorización y comprensión. El texto del Kama Sutra, al ofrecer explicaciones sobre cómo tener éxito en una seducción, no resiste la tentación de promocionarse a sí mismo, cuando señala que aquellos hombres que han aprendido su sabiduría están considerados como unos grandes seductores. Muchas de las categorías asignadas a los hombres que tienen éxito con las esposas de otros hombres no tienen nada de extraordinario. Por ejemplo, ¿qué mujer no se sentiría atraída por un hombre que le demuestra las carencias de su marido? ¿Qué defecto se le puede encontrar a un hombre que hace las cosas que gustan a las mujeres? Por supuesto que este libro sagrado es realista y menciona una cantidad de casos en los que el buen seductor puede fallar, contrario al dicho antiguo de que no hay mujer difícil, sino mal seducida. ¿Cuáles son las posibles causas para el fracaso del supuesto seductor? En el caso de la mujer casada o con pareja, la razón más obvia por la que una mujer no quiera una relación extramatrimonial es porque es feliz en su matrimonio o quizá sencillamente porque tiene miedo de que la descubran. El Kama Sutra le recomienda que no gaste infructuosamente su tiempo intentando seducir: a una mujer que ama a su marido; a la mujer que tiene un rango social superior o inferior; a la que lo considera a usted nada más que como un amigo o a una mujer que lo considera a usted un hombre liebre, esto es, de pene pequeño, entre otras causas. Entonces, según el libro sagrado hindú ¿quién es el que puede tener éxito con las mujeres? En primer lugar, los hombres que conocen el Kama Sutra, seguido por aquellos que tienen buena labia, o sea, verbosidad persuasiva y gracia en el hablar, que saben narrar una buena historia; los buenos oradores; los hombres hábiles en los juegos; los hombres que saben lo que desean las mujeres; aquellos que han actuado como intermediarios en el pasado; el hombre que ha sido amante de una de sus amigas; el vecino sensual; los hombres apuestos; los hombres generosos y amantes de la diversión y los hombres elegantes y bien vestidos. Pero volvamos al título de este capítulo: ¿Qué excita más a la mujer? ¿Será acaso algo similar a los hombres en donde una anatomía perfecta al desnudo desencadena el deseo? ¿Será que al ver a un hombre desnudo una mujer se excita? La mejor manera de saberlo es preguntándole a ellas qué las excita más. En una encuesta de opinión que hice casi todas las mujeres entrevistadas consideraron las caricias y los juegos sexuales preliminares, o las acciones en el propio inicio del coito, como lo que más las excita sexualmente. Esas respuestas calzan exactamente con las recomendaciones del Kama Sutra en el libro dos, denominado La Unión Sexual en el que se considera que más allá de la resistencia y los apetitos, también es necesario considerar el tiempo, dejando claramente establecido que a las mujeres no les gusta que los hombres acaben rápidamente y suelen preferir a los que aguantan más, para poder alcanzar el orgasmo y recomienda: “ajustemos el ritmo del acto sexual según el tipo de órgano(tamaño grande, mediano y pequeño) y la disposición (energía sexual alta, media y baja), de forma tal que la mujer tenga garantizado el orgasmo”. Los diferentes tipos de juegos sexuales preliminares en general abarcan acciones físicas como el abrazo, el beso, el mordisco, arañar y pegar; pero en gran manera dependen de las preferencias de las mujeres de las diferentes regiones del mundo, por ejemplo, algunas disfrutan con el empleo de un lenguaje soez y a otras les gustan los golpes. Además de ocuparse de las diferentes posturas más adecuadas para la penetración, el Kama Sutra considera varias técnicas adicionales para aumentar la pasión durante todo el encuentro; comienza con tres acciones básicas asociadas con la cópula, que son, el beso, el mordisco y el rasguño, que recomienda utilizarlos conjuntamente, reforzándolos con efectos sonoros como los gemidos cariñosos o palmadas suaves con la mano abierta. El aforismo 2.4.31 del Kama Sutra reza: “no hay mejor manera de hacer que la pasión florezca que con los actos de los dientes y las uñas”. Arriba les dije que para saber qué es lo que más excita a la mujer realicé una encuesta de opinión, pues bien, una mujer encuestada me contestó textualmente lo mismo que el estribillo de la canción La Guitarra y la Mujer de la famosa banda mexicana de música romántica, originaria de Guanajuato, ganadora de discos de oro y platino Los Caminantes: “La guitarra es como la mujer, si no la tocas no suena”. Otras mujeres entrevistadas me expresaron una miscelánea de opiniones, asombrosamente, todas concordantes con la fisiología de la excitación sexual femenina que explicaremos en detalle más adelante, pero conozcamos algunas de esas sugestivas respuestas dadas a nuestra interrogación ¿qué excita más a la mujer?: “que me toquen los genitales”; “ver a un hombre excitándose”; “cuando siento que me penetra”; “si me penetra y me succiona los pezones a la vez, sobre todo el pezón izquierdo”. LA TESTOSTERONA Y LA RESPUESTA SEXUAL FEMENINAMas la mujer, al igual que el hombre, por la acción de la hormona testosterona, siente deseos, tiene fantasías y pensamientos sexuales, mucho antes de ser tocada. Eso lo descubrió la Dra. Helen Singer Kaplan, médica siquiatra, reconocida pionera en la adaptación de los métodos de laboratorio de Masters y Johnson y de la técnica de terapia sexual a la gran masa de población que no podía asistir, por razones de trabajo, a los cursos regulares de tratamiento. La Dra. Kaplan, al estudiar el ciclo de respuesta sexual, describió la fisiología del deseo sexual en sus orígenes en los circuitos sexuales del cerebro mediados por la hormona testosterona expresándolo textualmente así: “para el funcionamiento normal de los circuitos sexuales del cerebro tanto en hombres como en mujeres, son necesarios niveles adecuados de testosterona y un balance apropiado de los neurotransmisores serotonina y dopamina y de las catecolaminas”. Con este aporte científico, la Dra. Kaplan modificó el ciclo de respuesta sexual descrito anteriormente por Masters y Johnson, reconociéndose modernamente que la primera fase de respuesta es la fase de deseo sexual, conocida también como libido, y precede a la estimulación física y psicológica de la que habla el afamado grupo musical azteca Los Caminantes en su canción. Definitivamente existe un nexo entre lo emocional y lo físico, y el papel más elemental de las caricias preliminares es excitar a la pareja para que se den las manifestaciones físicas de excitación sexual, esto es, la erección del pene del hombre y la lubricación vaginal de la mujer. Pero tales caricias preliminares no marchan obligatoriamente en forma paralela en los dos géneros. Según la Dra. Ruth Westheimer, en su libro Sexo para Dummies, “debido a que un hombre joven puede lograr una erección con sólo pensar en lo que sucederá a continuación, su versión de preliminares puede ser sencillamente entrar en la habitación”. Pero la mujer llega a esta fase con menor velocidad, por lo que de nuevo la canción de Los Caminantes dice la verdad, cuando repite el estribillo: “si no la tocas no suena”. La excitación, que es la segunda fase del ciclo de respuesta sexual, comienza cuando los genitales experimentan el fenómeno de vasocongestión, o sea, que hay un incremento del flujo sanguíneo que provoca agrandamiento de los labios vaginales, erección del clítoris, humedad vaginal y más lejanamente, endurecimiento y erección de los pezones y agrandamiento de los pechos. En esa fase entran en juego una serie de reflejos musculares y vasculares que en su punto máximo desencadenaran el momento de placer y de descarga emocional conocido con el nombre de orgasmo, que se acompaña de la eyaculación de los líquidos prostáticos de la mujer y seminal del hombre. Cuando en los medios de comunicación me han preguntado qué es el orgasmo, siempre he tenido demasiados problemas para definirlo, lo único que alcanzo a contestar es lo siguiente: “es una poderosa fuerza muscular y síquica que rebalsa todo nuestro cuerpo, no importa si uno es físicamente débil, y te convierte en un enérgico toro que se propulsa por un deseo intenso de llegar a la cima, la que es algo delicioso, celestial, una transportación a un mundo de placer máximo, algo sublime e indescriptible, una descarga de energía sumamente relajante que al cesar te deja feliz y reposado como el buen sotol ”. Y como la naturaleza del placer orgásmico es lógicamente compartida por ambos miembros de la pareja, la mujer siente exactamente lo mismo que el hombre. ¡COMBATAMOS LA ANORGASMIA!Por causa de lo bello y delicioso del placer orgásmico soy un ferviente convencido de que la dificultad de obtener el orgasmo y la misma anorgasmia deben ser combatidas con las armas más poderosas a nuestro alcance, porque alienan al ser humano al quitarle lo más hermoso de la vida, que es lo que describió Sara, la esposa del Patriarca Abraham cuando fue informada por el ángel de Dios que a su edad avanzada iba a ser madre al decir entre sí, riéndose: “¿Después que he envejecido tendré deleite, siendo también mi marido ya viejo?” Al interpretar esa frase podríamos decir que ella se preguntó: ¿volveré a tener orgasmo siendo mi marido impotente sexual? La excitación sexual femenina resulta de una combinación de eventos vasocongestivos y neuromusculares que incluyen hinchazón incrementada del clítoris, las paredes de la vagina y los labios genitales, así como aumento del diámetro y longitud de la cavidad vaginal y de la lubricación. Básicamente entran en función dos reflejos espinales pelvianos, el reflejo muscular que provoca la contracción de todos los músculos del piso de la pelvis, y el reflejo vascular, que es el que provoca la ampliación de los vasos sanguíneos genitales con aumento del flujo de sangre, que origina la erección del clítoris, la hinchazón genital y la humedad vaginal.

ERÓTICA DE LOS PEZONES: OXITOCINA Y ORGASMO
En el capítulo siete ¿Qué Excita Más al Hombre? al mostrar la opinión de algunos expertos sobre las partes de la anatomía femenina que llaman más la atención del ojo del hombre, observé que por ningún lado le encontraron valor afrodisíaco a los pechos; no obstante, para muchos hombres existe una verdadera erótica de los pezones, y de hecho, es difícil sustraerse al influjo de unos pechos intuidos a través de una camiseta. El pecho atrae como un poderoso imán y cosas o situaciones tan específicas como un pezón que se insinúa bajo una prenda ajustada o un roce coqueto que pone en alerta los pezones jamás pasan desapercibidas. Para muchos hombres un pecho coronado por pezones es una atracción irresistible, fascinante, a tal grado que solamente la palabra pezón ya conlleva una importante carga erótica. Aunque tradicionalmente los pechos son fundamentales para la alimentación del bebé en el amamantamiento, las investigaciones modernas le han descubierto nuevas funciones muy estrechamente ligadas al placer sexual. Cuando el bebé succiona el pezón, origina impulsos nerviosos que estimulan la parte anterior de la hipófisis o glándula pituitaria situada en la base del cráneo, para que libere la hormona prolactina, cuya función es desencadenar la secreción de leche. Cuanta más cantidad de leche tome el bebé, mayor será la estimulación de la hipófisis anterior y por ende se producirá más prolactina y más leche producirá la madre. Pero asimismo, la succión del pezón también estimula la parte posterior de la misma glándula hipófisis, para que libere la hormona oxitocina, cuya función tradicionalmente conocida es la de contraer los conductos mamarios para que se produzca la eyección de la leche. Entonces, para que la mujer pueda producir la leche materna debe estar bajo la influencia de las hormonas prolactina y oxitocina. La prolactina es la encargada de que haya producción de leche y la oxitocina desencadena la salida o expulsión de la leche. Los principales estímulos que provocan la liberación de la oxitocina hacia la corriente sanguínea además de la succión del pezón, como mencionamos arriba son, la estimulación de los genitales y la distensión del cuello uterino durante el trabajo de parto, conociéndose este último con el nombre de reflejo de Ferguson. Sin embargo, investigaciones modernas en animales y seres humanos han encontrado nuevas funciones de la oxitocina que tienen que ver con el reconocimiento de la pareja sexual, la conducta social y el orgasmo. Se piensa que su función está asociada con la afectividad, la ternura, el contacto y el orgasmo en ambos sexos, por lo que algunos la llaman la "molécula de la monogamia" o "molécula de la confianza". En el cerebro parece estar involucrada en el reconocimiento y establecimiento de relaciones sociales y, según un estudio conducido por M. Kosfeld, de la Universidad de Zúrich, Suiza, publicado en la revista Nature, 2005, “una sola inhalación de oxitocina incrementa la confianza en los humanos”. El Dr. Ernest Fehr, co-autor de esta investigación afirmó: “los niveles elevados de oxitocina en la sangre mejoran la capacidad de los individuos para confiar en otras personas. La oxitocina es capaz de promover la actividad social y ayuda a superar el temor a la malicia”. Otro interesante estudio llevado a cabo por los doctores Paul J. Zak, del Departamento de Neurología de la Universidad de Loma Linda, California, EE.UU., Ángela A. Stanton, de la Escuela Argyrus de Economía y Negocios, Universidad Chapman, California, EE.UU., y Sheila Ahmadi, de la Universidad de California en Los Ángeles, EE.UU. ha demostrado al mundo que la oxitocina incrementa la generosidad, o sea, la liberalidad y el desprendimiento en los seres humanos. En este estudio los participantes fueron infundidos con 40 UI de oxitocina o placebo e involucrados en la toma de decisión en un solo intento ciego de cómo dividir una suma de dinero con una persona desconocida que podría ser rechazada. Los del grupo de oxitocina fueron ochenta por ciento más generosos que los que recibieron un placebo de tal manera que la oxitocina se convierte así en la hormona ideal del orgasmo, para el cual se necesita una pareja sexual de confianza, a quien se le tiene afecto y cariño, y una técnica sexual dirigida a estimular la secreción de oxitocina por medio de la succión de los pezones, la estimulación del clítoris y la penetración vaginal profunda. Todo esto explica con claridad por qué las mujeres encuestadas respondieron que se sienten mayormente estimuladas cuando sus parejas les tocan los genitales, les succionan los pezones y las penetran.

CLAVE DEL ÉXITO PARA LLEVARLA AL ORGASMO
En base a los estudios neuroanatómicos y neurofisiológicos, si usted estimado lector es hombre, ahora mismo le voy a dar la clave del éxito para que su pareja quede completamente satisfecha en el sexo. La doctrina es muy sencilla: todos en alguna ocasión hemos leído, escuchado o visto la conocida obra de Lewis Carroll, "Alicia En El País De Las Maravillas". De este cuento hay algo que me llama la atención y es que cuando Alicia está perdida y se encuentra en una intersección de varios caminos, ella no sabe cuál tomar y de pronto aparece el Gato Risón al cual ella le pregunta qué camino tomar. El gato le contesta con otra pregunta: ¿hacia dónde vas? Y Alicia responde: No sé. Entonces el gato abre su boca y pronuncia una de las frases que más me ha impactado en toda mi vida y que me ha ayudado mucho en extremo para salir adelante con éxito: “¡Si no sabes hacia dónde vas, cualquier camino te lleva ahí”. Mas si sabemos a dónde vamos, o qué es lo que buscamos, entonces podemos llegar ahí o encontrarlo; si sabemos hacia dónde queremos llegar, sabremos con exactitud qué opción debemos tomar. ¿Cuáles son tus metas? ¿Cuáles son tus sueños? ¿Qué estás haciendo para conseguirlos? ¿Estás sembrando la semilla correcta en el terreno correcto? Esa es la doctrina y estoy completamente seguro de que usted quiere llevar a su pareja al orgasmo y la felicidad sexual. La ruta es ésta: primero el clítoris, luego el pezón y por último la vagina. La razón científica es la siguiente: la velocidad de conducción de las fibras nerviosas del clítoris es 20 a 30 veces más rápida que la de las fibras nerviosas de la vagina, con lo que usted puede conseguir que su pareja descargue pronto la suficiente oxitocina para que empiece lo más rápidamente posible a sentirse confiada y generosa con usted además de excitada. Luego refuerce la descarga trepando a los pechos y succionando suavemente los pezones para enviar más señales estimuladoras de la hormona del orgasmo y por último, penetre con la técnica china, seis a los lados y una al centro y adentro. Son seis movimientos superficiales, en los que sólo introduce únicamente la cabeza del pene y un poquito más, uno a la derecha otro a la izquierda, otro a la derecha y otro a la izquierda y así sucesivamente y el séptimo movimiento es una penetración al centro y adentro (profunda), que usted con sus propios ojos verá cómo hace vibrar de placer a su pareja. ¡Ella lo agradecerá con pasión! Y si usted, estimada lectora, es mujer, muéstrele a su pareja este párrafo del libro y exíjale que lo lleve a la práctica hoy mismo.

LOS CHICOS MALOS CAUTIVAN A LAS MUJERES
Al analizar la otra cara de la moneda y hacer un enfoque a posteriori, tratando de conocer la causa al analizar los resultados, quiero exponer algunas situaciones que podrían ser calificadas por algunos y algunas como triviales pero que estimo vale la pena considerar al abordar el tema de qué es lo que más excita a las mujeres. En el caso de los hombres, en base a lo expuesto a lo largo de esta obra, lo que los excita más es algo transitivo que proviene del exterior y está íntimamente relacionado a la mujer-objeto que es valorada exclusivamente por su belleza o atractivo sexual y a las características físicas y anatómicas del cuerpo femenino. En el caso de las mujeres, en base a lo que ellas mismas nos han referido al responder a nuestras preguntas, lo que las excita más es algo intrínseco en ellas, que existe en lo más íntimo, pero de una sensibilidad tal que puede aflorar con facilidad ante la mínima presión ejercida por un sujeto externo a ellas básicamente que les guste, les atraiga o lo amen. No obstante, como lo afirmó en otra parte de este libro mi amiga española la psicóloga colegiada Elena Gómez Rey, históricamente la mujer ha encontrado en el hombre protección y cuido no sólo para ella sino también para toda la prole, por lo que pueden entrar en consideración nuevos valores, situaciones y condiciones que adicionen también nuevos ingredientes que exciten o que induzcan la excitación sexual en las mujeres. ¿Qué busca en un hombre la mujer del siglo veintiuno? ¿Acaso busca un rico hombre o un hombre rico? ¿Acaso busca placer o seguridad? La respuesta podría estar en alguna información disponible por la internet ¡fuente de todo! Realmente existe mucha información reciente sumamente interesante sobre el tema del emparejamiento de hombres y mujeres, pero me ha llamado mucho la atención dos publicaciones que le dan evidente respaldo a uno de nuestros más antiguos estereotipos sobre la masculinidad: “los hombres que presentan una “tríada oscura” de rasgos de personalidad, que incluye una tendencia a ser astuto, engañoso y deshonesto, no sólo obtienen la mayoría de las mujeres, sino que también son los más exitosos en quitar las chicas a otros hombres“. Algo que hemos visto en la cruda realidad y que me han contado algunos de mis amigos que llaman a eso ley de la serie, en que hechos iguales se repiten consecutivamente, es que mientras más mujeres tiene un hombre más mujeres conquista, teniéndose la percepción subjetiva de que a las mujeres les atraen los hombres atrevidos, osados, machos, al estilo de James Bond, el Agente 007, que según algunos críticos del cine encarna el hombre perfecto del ideario femenino.
Pues bien, eso fue lo que encontraron los psicólogos investigadores Dr. Peter K. Jonason, de la Universidad Estatal de Nuevo México, EE.UU., y David P. Schmitt, de la Universidad Bradley en Illinois, EE.UU., en su estudio La Tríada Oscura: Facilitando una Estrategia de Corto Plazo para el Emparejamiento en Hombres, publicado en la revista European Journal of Personality, 2009. En resumen, se encuestó a 224 estudiantes encontrando que las características colectivamente conocidas como la tríada oscura, constituida por narcisismo, psicopatía y maquiavelismo, correlacionaron con el emparejamiento de corto plazo, de tal forma que aquellos que tenían un temperamento con las características antes enumeradas, tendían a tener numerosos amores, aunque de menos duración; pero dicha correlación fue mayor en los hombres que en las mujeres. De las personalidades socialmente rechazadas, las que más llaman la atención son las que constituyen dicha tríada oscura, propia de los chicos malos, antisociales, desadaptados, pero que cautivan a las mujeres. Son fríos y manipuladores, buscan admiración, atención, prestigio y estatus y son muy impulsivos y con bajo nivel de empatía. En el Congreso de la Sociedad de Conducta y Evolución llevado a cabo en Tokio en el año 2008 el Dr. David Schmitt de la Universidad Bradley de Illinois, EE.UU., presentó los resultados de una encuesta sobre una muestra de 35,000 personas de 57 países que demuestran que existe una relación similar entre la tríada oscura y el éxito reproductor en hombres. El Dr. Schmitt aseveró: “Es universal a lo largo de todas las culturas, si se tienen puntuaciones altas en estos rasgos, que se sea más activo en relaciones a corto plazo. En esos casos tienen mayor tendencia a robar las parejas de los demás para una aventura amorosa breve”. Entonces cabe la pregunta ¿los malos gustan más a las mujeres? Según estos resultados parece que sí, porque, según opinan algunos, de manera inconsciente, muchas mujeres encuentran que este tipo de hombría las protege y les garantiza una mayor procreación. La psicóloga evolucionista Dra. Gayle Brewer, de la Universidad de Lancashire Central en el Reino Unido, al comentar estos resultados, apunta que si bien las mujeres prefieren a los chicos malos para las aventuras cortas, para las relaciones duraderas eligen a los hombres más cariñosos y generosos.

BUENOS BAILADORES DE GARRA FUERTE
Según otra interesante investigación, las mujeres no sólo valoran características estáticas en los hombres, como los rasgos faciales y corporales, sino que señales dinámicas como la capacidad de bailar también pueden ser utilizadas para evaluar la calidad del hombre en términos de fuerza y dominación. Por su destreza ¡Nadie imagina un Mr. Beam mujeriego! Todo parece indicar que buenos bailadores hacen mejores parejas. Así lo demostró un estudio conducido por Nadine Hugill, del Departamento de Sociobiología y Antropología de la Universidad de Göttingen, Alemania, en el que se encontró que los hombres cuyo baile fue calificado por las mujeres como atractivo y firme eran físicamente más fuertes que aquellos cuyos movimientos no estuvieron a la par. En la investigación pusieron a prueba a 50 chicas estudiantes mostrándoles un vídeo donde 40 hombres heterosexuales bailaban la canción Let Me Entertain You, de Robbie Williams. Veinticinco de ellas tenían que juzgar el atractivo de los bailarines, las otras 25 tenían que escoger a los que mejor supieran expresar sus sentimientos. Los bailarines iban todos de blanco y sus características faciales y corporales estaban ocultas mediante un filtro especial. Un dinamómetro medía también la fuerza de agarre de las manos de cada uno. Los resultados, publicados en la revista Personality and Individual Differences, 2009, mostraron una correlación entre el puntaje de fuerza y la atracción y firmeza, de tal manera que la elección de los hombres más atractivos y seguros para las chicas coincidía con los que mayor fuerza demostraron con la medición del dinamómetro. Ya sabíamos que bailar es bueno para la salud y que moverse bien, al ritmo de la música, estimula los sentidos y mejora las condiciones del corazón y los pulmones, ayuda a los huesos y articulaciones, levanta el ánimo, aleja la depresión y la grasa que sobra. Tal vez ya lo notábamos, pero no teníamos evidencias científicas de lo que ya sabíamos y es que el hombre que baila atrae más a la mujer y además equilibra la vida de pareja. Todo parece indicar que definitivamente, saber bailar y saber llevar bien a la compañera son elementos significativos para acrecentar el éxito o el fracaso sentimental de una pareja. ¿Será que únicamente aquellos hombres que desarrollan los talentos de John Travolta y Patrick Swayze son los hombres de éxito en las conquistas del amor? ¿Será que enfrentamos la atracción de la maldad? ¿Será correcto decir que el ser bueno hace al hombre un perdedor? Al reflexionar sobre este controversial tema y teniendo en frente los resultados de las dos investigaciones arriba presentadas, casi obligatoriamente me viene a mi memoria la parábola del Hijo Pródigo en la Santa Biblia, en el evangelio del médico San Lucas capítulo 15, en que aparece la reacción del buen hijo ante las atenciones brindadas al chico malo. El chico bueno lo expresó textualmente de la manera siguiente: “He aquí, tantos años te sirvo, y nunca me has dado ni un cabrito…pero cuando vino este tu hijo, que ha consumido tus bienes con rameras…has hecho matar para él el becerro gordo”. Entonces me pregunto ¿vale la pena ser un hombre bueno? Y en base a lo que se ha dicho arriba que ha comentado la sobresaliente psicóloga evolucionista Dra. Gayle Brewer de que los chicos malos son para las aventuras cortas y los chicos buenos para las relaciones duraderas necesariamente también me pregunto: ¿me habré de contentar en ser un plato de segunda mesa? Son interrogantes que quedan en el ambiente y que seguramente tendrán diversas respuestas de acuerdo a las opiniones y experiencias de cada lector o lectora de esta obra, pero que en sentido práctico permitirán al joven lector obtener elementos y fundamentos para la toma de una buena decisión para su futuro en la vida.
En conclusión, ¿Qué es lo que más excita a la mujer? Parece que en términos generales la mejor respuesta sería: “un hombre, decidido, seguro de si mismo, que transmita fortaleza y que sea un excelente acariciador”. ¡Los pusilánimes no cuentan!